Tengo una soledad, tan extensa,
llena de dar, de mirar como los momentos se van, y vuelves a mí, muy tarde para mí.
Tengo una soledad, que se une con la nostalgia de ver que me voy.
Se marcha la niña ingenua, se marchan las ilusiones, los sueños de princesas, el cuento encantado se abre ante mí con la frialdad de una rota realidad, de promesas que nunca llegarán a puerto, pues en la extensión de tus palabras no existía tierra a la vista, solo un mar impetuoso, lleno de traiciones, dispuesto al naufragio.... que tanto.. tanto!!! busque evitar.
Puede mi vida... girar, darle una mano a la luz y verte, dejarte atrás, con tus penas, con tus labios llenos de vacíos, de bellas palabras que no alcanzan a ser reales.
puede mi vida cambiar, si recuerdo como era amarme y no amarte, si me animo a darme otra oportunidad, si decido dejar de llorar y levantarme en las mañanas para sonreír, mirar al cielo, creer que existe algo más allí.