....un grito...
en medio del absoluto silencio...
porque ya no espero respuestas...
he aprendido que la diferencia no se perdona.
y por tanto siempre lo estuve y estoy hoy,
condenada,
Te digo una cosa-nos mintieron- allá afuera no hay nadie-
jamás lo hubo... pero fue lindo creerlo por un tiempo.
Aunque tranquilo, no te angusties, no eres solo tú,
-somos todos-
pd: La sociedad perdona a veces al criminal,
pero no perdona nunca al soñador.
Oscar Wilde